08 de julio 2025.- El presidente Luis Arce alertó que, mientras el financiamiento externo siga “estrangulado” por la Asamblea Legislativa, no se podrá asegurar el abastecimiento de diésel y gasolina en el país. Durante un acto en la Casa Grande del Pueblo, el mandatario explicó que los recursos para la compra de combustibles dependen directamente del aval legislativo, lo que actualmente impide atender con normalidad la demanda nacional.
Arce explicó que Bolivia enfrenta dos grandes salidas de capital: la importación de combustibles, que cuesta al Estado unos 3.000 millones de dólares anuales, y el pago de la deuda externa. Aseguró que si no se viabilizan los créditos internacionales, será imposible garantizar el suministro continuo de carburantes.
El jefe de Estado lamentó la falta de compromiso de algunos sectores políticos en dar una solución estructural al problema energético. Criticó que los candidatos presidenciales no discutan sobre el tema de hidrocarburos, pese a que, según dijo, su gobierno ya exploró 18 pozos como parte de una estrategia a largo plazo.
Asimismo, mencionó que en esta etapa de transición, la única forma de evitar una crisis mayor es accediendo a financiamiento externo. “Todo es préstamo, pero no hay otra alternativa”, dijo, reiterando que si no se apoyan los esfuerzos en exploración y producción interna, no se podrá garantizar nada en términos de abastecimiento.
Finalmente, Arce afirmó que actualmente se cubre el 100% de la demanda, pero eso no es suficiente. Para reducir las filas y normalizar la situación, se necesitaría inyectar entre un 120 y 130% de combustible a diario, lo cual solo será posible con apoyo económico externo.
